En 2021, según cifras de SEOM (Sociedad Española de Oncología Médica) fueron diagnosticados 33.375 nuevos casos de cáncer de mama en España, siendo el primer cáncer tratado en la mujer. El 30% de los casos son metastásicos o sea que a fecha de hoy no tienen cura.
Entre un 1.5 – 2% de estos nuevos casos lo han desarrollado varones. Ciertamente, el varón también puede desarrollar un cáncer de mama, pues aunque no seamos conscientes y siempre se ha asociado a la mujer por la incidencia, también tenemos glándulas mamarias.
Empezando por la errónea educación en edades primarias donde de los libros de texto ya se indica que el hombre solo tiene pecho, pero no señala la mama, conduce a un crecimiento inconsciente y también invisibilizado de la patología y es por ello por lo que cuando hay algún síntoma de los cuales deberíamos ponernos en alerta, no acudimos al profesional, por esta falta de concienciación social.
Un bulto, un pezón retraído, segregación líquida por el pezón, cambios de temperatura o asimetrías, son algunos síntomas que nos deberían alertar y consultar al profesional lo antes posible.
El factor hereditario también juega un papel importante. Se estima que en un 20% de las ocasiones podríamos haber heredado algún gen como el BRCA1 o 2, pero también lo podemos transmitir en líneas de sucesión tanto femeninas como masculinas. El test genético ayudará a identificar esta mutación y por tanto a poder prevenir.
Otra barrera importante es que el varón no tiene campañas de prevención ni programas de cribaje dada la poca “incidencia”. Juega un papel muy importante que esa conciencia tome valor ya no solo en la persona, sino también en el profesional al que acudimos para que descarte o confirme el diagnóstico. Algunos de los pacientes son devueltos para sus hogares menospreciando la importancia del síntoma. Como en la mujer está claro que el ginecólogo es el responsable de las revisiones, en el caso del varón no hay un médico referente para esa consulta, dependiendo absolutamente del médico general y el médico de atención primaria, que deberá tener conocimiento de los síntomas y de la patología para derivar al “paciente” a las pruebas diagnósticas correspondientes.
¿Por qué Asociación INVI? Porqué anteriormente no había una asociación exclusiva a esta patología, porqué el Hacer Visible lo Invisible es una responsabilidad/problema social que hay que poner encima la mesa, incluirlo y tratarlo como es debido.
Al no ser conscientes de que el varón también pueda desarrollar un cáncer de mama, o el circuito no construido hasta el diagnóstico que debe hacer el varón, los diagnósticos en su gran mayoría son de una enfermedad metastásica o avanzada, muchas veces haciéndose muy difícil su abordaje. Es por ello el lema de la Asociación INVI de Hacer Visible lo Invisible y que la sociedad y demás agentes implicados, tomen conciencia y vayan transformando la actualidad sobre el cáncer de mama masculino.
También hay que destacar que, hasta no hace mucho tiempo, en los ensayos o investigaciones en cáncer de mama no se incluían los hombres. Ahora, cada vez más, se van incluyendo, pero no es suficiente. Falta ese conocimiento, registros retrospectivos, para que nos den información y así poder personalizar esa medicina dirigida y más precisa.
En España, afortunadamente, se está llevando a cabo un proyecto de investigación pionero en Europa desde la Fundación GEICAM, en donde se analizarán las muestras tumorales de 1000 pacientes retrospectivamente y se podrá obtener mucha más información.
Es importante saber dónde estamos y hacia dónde tenemos que ir con esta enfermedad, que para unos es poco, pero para esos pocos es mucho.
Entre todos podemos ejercer de multiplicadores para que esa conciencia social vaya en aumento y por tanto haya una disminución de casos diagnosticados en fases tardías.